Las fresas marinadas con vino rosado, yogur y vainilla tienen el título más largo que su dificultad y eso no es lo mejor, encima está estupenda.
Este es el postre perfecto cuando quieres algo dulce, pero sin caer en la decadencia de una tarta de chocolate de cinco pisos. Fresas frescas, un buen vino rosado, un toque de vainilla y la cremosidad del yogur hacen que parezca un postre sofisticado, pero en realidad es facilísimo de preparar. Además, te hace quedar como un chef sin haber sudado en la cocina.
Un postre con clase (pero sin remordimientos) o sí, pero da igual lo importante es que quedas como un repostero sin dar un palo al agua como tu jefe, de nada.
Dificultad
Tan fácil que podrías hacerlo con una copa de vino en la mano (de hecho, te lo recomiendo).
Ingredientes
- 250 g de fresas frescas.
- 100 ml de vino rosado.
- 1 cucharada de azúcar (opcional, según lo dulce que te guste la vida)
- 1 yogur natural o griego (según tu nivel de indulgencia)
- 1/2 cucharadita de extracto de vainilla.
- Hojas de menta (para darle el toque «Instagram»)
Preparación
- Marinar las fresas: Lava y corta las fresas en cuartos. Ponlas en un bol con el vino rosado y el azúcar. Deja reposar al menos 30 minutos en la nevera (o hasta 2 horas si quieres más intensidad de sabor).
- Preparar la crema de yogur: Mezcla el yogur con la vainilla hasta que quede bien integrado. Si te gusta más dulce, añade una pizca de miel.
- Montaje: Sirve las fresas marinadas en copas o cuencos, añade una generosa cucharada de yogur por encima y decora con unas hojas de menta.
- Disfrutar: Coge una cuchara, cierra los ojos y dale un bocado. Ya está, eres un sibarita.
Maridaje Canalla
¿Te ha sobrado vino rosado? Pues ya tienes la bebida perfecta para este postre. Si no, prueba con un espumoso rosado bien frío.
Menú recomendado:
- Los cuartos traseros de pollo guisados.
- Las fresas Marinadas con Vino Rosado, Yogur y Vainilla.
Trucos para bordar esta receta
- Si quieres darle un punto más gourmet, ralla un poco de chocolate blanco por encima.
- Para un extra crujiente, añade almendras laminadas tostadas.
- Puedes sustituir el vino rosado por cava rosado si te sientes especialmente burgués.
Resumen Nutricional
Ligero, fresco y con un toque de sofisticación. Apto para quienes quieren postrear sin remordimientos.
¿Por qué esta receta mola tanto?
Porque es fácil, rápida, y parece mucho más elaborada de lo que realmente es. Además, combina frescura, cremosidad y un toque de vino que siempre alegra el día.
Si te ha gustado esta receta, prueba a hacerla con otras frutas y cuéntamelo en los comentarios. ¡Brindemos por los postres fáciles y deliciosos!
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