Tienes boloñesa de más y no quieres repetir con pasta. No pasa nada, aquí tienes la solución perfecta: la musaka con boloñesa, capas de berenjena asada, boloñesa bien especiada y una bechamel cremosa que hará que te olvides de la pasta.
Con esta receta seguramente tanto los griegos como los italianos leerán esta receta con temblores en el ojo con inusitadas ganas de asesinarme, pero la globalización es lo que tienes coges las sobras y dices que eres un cocinero global y que te encanta juntar lo mejor de cada país.
La musaka es el plato que demuestra que las berenjenas pueden ser sexis. Su origen está en los Balcanes y el Medio Oriente. Pero si hablamos de la versión griega (la rockstar de las musakas), la cosa va así: capas de berenjena doradita, carne picada de cordero con tomate, y una bechamel cremosa que lo cubre todo como una manta calentita antes de ir al horno.
Dificultad
Más fácil que arrepentirse de no haber hecho más cantidad.
Ingredientes
- Sobras de boloñesa (si tienes mucha, mejor 😏)
- 2 berenjenas grandes.
- Aceite de oliva virgen extra.
- Sal y pimienta.
- 500 ml de leche.
- 40 g de mantequilla.
- 40 g de harina.
- Nuez moscada.
- Queso rallado (para gratinar)
Preparación
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Precalentar el horno a 200°C.
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Preparar las berenjenas: Cortarlas en láminas finas, salarlas y dejarlas sudar unos 10-15 min para quitarles el amargor. Luego, secarlas con papel de cocina y dorarlas en una sartén con un poco de aceite.
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Montar la musaka: En una fuente de horno, alternar capas de berenjena con la boloñesa hasta acabar los ingredientes.
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Hacer la bechamel: Derretir la mantequilla en un cazo, añadir la harina y cocinarla un minuto removiendo. Incorporar la leche poco a poco sin dejar de remover hasta que espese. Salpimentar y añadir nuez moscada.
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Cubrir y gratinar: Verter la bechamel sobre la musaka, espolvorear queso rallado y hornear a 200°C unos 20 min o hasta que esté bien dorada.
Maridaje Canalla
Vino tinto con cuerpo. Algo que acompañe sin miedo el festival de sabor que te vas a zampar.
Trucos para bordar esta receta
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Si no te va la berenjena, prueba con calabacín.
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Un toque de canela en la boloñesa y parecerá que te la ha cocinado una yaya griega.
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Puedes hacer la musaka con patata en vez de berenjena para una versión más contundente.
MENÚ RECOMENDADO:
- La kartoffelsalat Canalla: Ensalada de patata.
- La Musaka con boloñesa.
- El pan de Calatrava con ensaimadas.
Resumen Nutricional
Contundente pero sin remordimientos. Aprovechamiento de nivel experto.
¿Por qué esta receta mola tanto?
Porque da una segunda vida a la boloñesa y, además, es una bomba de sabor con ingredientes sencillos.
Si te ha gustado, dime cómo te ha quedado. Y si le has hecho algún tuneo, cuéntamelo. ¡Quiero saberlo todo! 😜
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